Palabras mágicas: flexibilidad y reconocimiento
Un año está llegando a su fin y otro está a punto de comenzar, pero hay dos cuestiones que seguirán siendo relevantes en el mundo corporativo: flexibilidad y reconocimiento. En las investigaciones de Robert Half, tanto en reuniones como en redes sociales, el mensaje es muy claro: entre las principales aspiraciones de los profesionales se encuentran mantener los modelos flexibles y la necesidad de sentirse valorados.
La flexibilidad está directamente relacionada con un mejor equilibrio entre la vida personal y profesional. El modelo de trabajo híbrido es crucial para muchos profesionales y puede influir en decisiones de cambio de empleo y renuncias. Por otro lado, el reconocimiento abarca un amplio espectro de expectativas, que incluyen salario y beneficios, pero no se limitan a eso. Los trabajadores también esperan ser valorados en su día a día.
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Es necesario considerar el contexto económico
Hay buenas razones para que los empleadores presten atención a estos dos puntos. Una de ellas es el contexto económico, que tiende a intensificar la competencia por el talento. La tasa de desempleo entre profesionales calificados, es decir, aquellos con educación superior y más de 25 años, ha estado disminuyendo durante varios meses y tiende a seguir esa tendencia el próximo año si continuamos con el mismo ritmo de crecimiento económico.
Además, el rendimiento de los equipos depende enormemente del nivel de satisfacción que sienten hacia la organización en la que trabajan. La motivación, el compromiso, la iniciativa y otras cualidades que existen a nivel individual se ven afectadas por el entorno, pudiendo aumentar o disminuir con él. Una empresa más abierta y receptiva a las aspiraciones de los equipos probablemente tendrá más dedicación y mejores resultados que una compañía rígida e indiferente a las demandas de los trabajadores.
Cómo demostrar reconocimiento
Un primer paso para mejorar esta situación es cultivar la práctica del reconocimiento en el día a día con acciones como estas:
- Crea la cultura: anima a todos los niveles jerárquicos a expresar reconocimiento por el trabajo de los equipos y entre colegas, de modo que siempre haya oportunidades, ya sean pequeñas o grandes, para valorar los logros de los demás.
- Innova en las recompensas: días libres, cursos, viajes y entradas para espectáculos son algunas de las innumerables posibilidades para hacer que el gesto de valoración sea algo concreto y memorable.
- Sé genuino: más allá del valor material de la recompensa o las palabras utilizadas, la autenticidad es lo que cuenta al dar un feedback positivo. Sentir que el elogio es sincero marca la diferencia.
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Como en todas las relaciones, en las profesionales la reciprocidad también es muy bienvenida. Si los trabajadores cuentan con flexibilidad y reconocimiento, tendrán más condiciones de ser flexibles y expresar su admiración por la empresa. Es la famosa y saludable vía de doble sentido.